domingo, 6 de abril de 2014

the one that got away

Decía mi abuela que cuando una mujer se sintiera triste lo mejor que podía hacer era trenzarse el cabello; de esta manera el dolor quedaría atrapado entre los cabellos y no podría llegar hasta el resto del cuerpo.
Había que tener cuidado de que la tristeza no se metiera en los ojos pues los haría llover, tampoco era bueno dejarla entrar en nuestros labios pues los obligaría a decir cosas que no eran ciertas, que no se meta entre tus manos -me decía-, porque puedes tostar de más el café o dejar cruda la masa; y es que a la tristeza le gusta el sabor amargo.
Cuando te sientas triste niña, trenzate el cabello; atrapa el dolor en la madeja y déjalo escapar cuando el viento del norte pegue con fuerza.
Nuestro cabello es una red capaz de atraparlo todo, es fuerte como las raíces del ahuehuete y suave como la espuma del atole.
Que no te agarre desprevenida la melancolía mi niña, aún si tienes el corazón roto o los huesos fríos por alguna ausencia.
No la dejes meterse en ti con tu cabello suelto, porque fluirá en cascada por los canales que la luna ha trenzado entre tu cuerpo.
Trenza tu tristeza, decía, siempre trenza tu tristeza, y mañana despertarás con el canto del gorrión y la encontraras pálida y desvanecida entre el telar de tu cabello.


jueves, 20 de febrero de 2014

Tears don't mean you're losing.

Siempre ten presente que la piel se arruga, el pelo se vuelve blanco, los días se convierten en años...
Pero lo importante no cambia; tu fuerza y tu convicción no tienen edad.
Tu espíritu es el plumero de cualquier tela de araña.
Detrás de cada línea de llegada, hay una de partida.
Detrás de cada logro, hay otro desafío.
Mientras estés viva, siéntete viva.
Si extrañas lo que hacías, vuelve a hacerlo.
No vivas de fotos amarillas...
Sigue aunque todos esperen que abandones.
No dejes que se oxide el hierro que hay en ti.
Haz que en vez de lástima, te tengan respeto.
Cuando por los años no puedas correr, trota.
Cuando no puedas trotar, camina.
Cuando no puedas caminar, usa el bastón.

Pero nunca te detengas!!



Madre Teresa de Calcuta.




lunes, 17 de febrero de 2014

Mirando nuestra carpeta de fotos del ordenador u ojeando nuestra caja con todos nuestros pequeños detalles y donde dormían los recuerdos que viví junto a ti... muere la tarde y cae la noche. Y yo sentada esperándote en el mismo sitio de siempre. Te quiero confesar que... Espero que todo te vaya bien.



las huellas dactilares no se borran de las vidas que tocamos.

Ella era una chica normal, una chica que reía enseñando los dientes, que bailaba como si no hubiera un mañana, que abraza todos los días a sus amigos. Una chica normal, que lo único que quería era enseñarle al mundo que su sonrisa valía mas que cualquier hombre o mujer, que quería demostrarle a la vida que ella había dejado de importarle, que ya no le quedaban más lagrimas, que estaba superado. Una chica que antes de meterse a la cama respira hondo tres veces mientras sus lágrimas cruzan su cara, que se aislaba en su dolor porque no ha conseguido olvidarla. No puede. ¿Como se olvida de todo lo que han compartido? Si siempre, cuando crees que ya esta superado hay algo que lo fastidia. Una canción que bailasteis juntas, un banco donde compartisteis cientos de tardes, una  foto que no has borrado ni borraras nunca... Una fecha, esa puta fecha del día que os conocisteis, del día que os disteis el primer beso, del día que te dijo que eras el centro de su pequeño mundo...


Crystalised

"Hola Estela, llevo rato mirando este vacío, blanco e insignificante papel. Siempre que voy a escribirte es como si mi mente me llevara al pasado, porqué recuerdo exactamente cuando empecé a escribirte y me dijiste “tienes que cerrar los ojos y dejar que tu corazón escriba”. Pues desde entonces siempre te escribo así, des del primer día. Llevo tiempo pensando en escribirte algo, pero no quiero que sea algo más. Esta carta no es una carta más, no es la típica carta que te escribo bonita en la que después nos besamos y me dices lo mucho que me quieres, no es esta. Esta carta está llena de inseguridades, de cuestiones, de tristeza y de lágrimas. Vengo a decirte con esto que sé que nuestra situación es muy difícil, que han pasado muchas cosas y que no es una hoja en blanco como esta, sino que está escrita por todos lados, con tachones y borradores…pero que aunque sea así, esta historia la he escrito contigo, así que haya los tachones que haya es mi carta favorita, porqué habla de ti, de ti y de mí, de NOSOTRAS al fin y al cabo. A veces me pregunto si me aguantaras por mucho más tiempo, si seguirás preguntándote que me case contigo, si seguirás pidiéndome besos, y luego, después de eso, se me hiela la boca el corazón y el cerebro, se me hiela todo el cuerpo por dentro y por fuera pensando que tu calor podría faltarme algún día. Con esta carta vengo a decirte que sueño cada día con despertar a tu lado día a día, que sueño con verte crecer a mi lado, que sueño con verte saltar obstáculos agarrada de mi mano, y que sueño con que un día podamos mirarnos llenas de arrugas y decir “mira hasta donde hemos llegado”. Sueño con todo eso y más porqué estoy enamorada de ti, más que el primer día. Des de que te vi cambiaste mi mundo, por eso supe que eras tú aquel tren del que nos hablan cuando somos pequeños, un tren que pasa una vez en la vida, y que aunque a veces descarrile o coja mucha velocidad y sentimos que no podamos, es el tren de nuestra vida, el tren que nos hará felices al cien por cien, que nos llevará al lugar real y puro donde siempre habíamos estado esperando. Yo encontré muy joven este tren, hay personas que lo encuentran tarde, que no lo encuentran nunca, o que incluso lo encuentran y lo dejan ir, pues bien, yo no quiero ser una de esas personas que dejan irlo, yo quiero subirme en él y pasar cada mes de mi vida, cada estación con sol nieve u hojas, cada ráfaga de aire y de calma, cada sentimiento, cada emoción y cada palabra. La cuestión que me pregunto a menudo y que quiero proponerte es, ¿Soy yo ese tren y quieres subirte en él? Te quiero muchísimo Estela, tanto, que no lo podría expresar ni con todas las palabras del mundo.



Firmado: la chica que quiere pasar el resto de su vida contigo y llenar la caja azul de historias interminables.








Sangre y fuego, sudor y lágrimas.


lunes, 2 de septiembre de 2013

Una vez alguien dijo...

"Descubriendo mi día a día me di cuenta de que me faltaban varios en mi calendario... cuando fui a buscarlos me dí cuenta de que se me caían de las manos los días que venían por delante... Finalmente decidí olvidar los perdidos y amarrar fuertemente los venideros... Ahora por el peso apenas puedo moverme..."

sábado, 27 de julio de 2013

-Hay millones de personas por ahí, pero al final todo se reduce a una sola. A veces me entra el pánico, me olvido de respirar, pero sé, sé que hay algo hermoso en todas las imperfecciones. Una hermosura que realzó para que yo la viera, una fuerza que nadie podrá quitarme jamás.

Hay un momentos en la vida en el que el camino se bifurca en dos y es el momento en el que tienes que decidir cual de los dos prefieres tomar. Tomar decisiones nunca es fácil. A veces hay que dejar escapar algo a lo que se está acostumbrado para comenzar con algo nuevo. Por eso muchas veces nos equivocamos, nos caemos y nos arrepentimos de no haber sabido escoger el camino correcto. Pero en eso consiste la vida. Tenemos que arriesgarnos porque créeme, el cambio puede ser mucho mejor. Porque en eso se basa la vida, caerse y levantarse, errar, aprender, y continuar.



make the world better

Una persona no puede cambiar el mundo de día para otro, ni siquiera tu. No podemos pretender acabar con la pobreza, el hambre, las guerras... Pero si que podemos tener detalles para un mundo mejor. Lo hacemos cada vez que amamos en vez de odiamos, cuando besamos en vez de insultarnos, cuando sacamos sonrisas donde solo hay lagrimas. Cuando ofrecemos ayuda a quien lo necesita, cuando abrazamos en vez de pegarnos. Son solo detalles, pero creo que es un buen modo de empezar.
Tú dices que amas la lluvia,
sin embargo usas un paraguas cuando llueve.
Tú dices que amas el sol,
pero siempre buscas una sombra cuando el sol brilla.
Tú dices que amas el viento,
pero cierras las ventanas cuando el viento sopla.
Por eso tengo miedo,
cuando dices que me amas.

Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación.

Nadie hace caso del agua que va después de la lluvia, cuando sale el sol. El agua se evapora, vuelve al aire, a nuestros pulmones, respirando el viento que sentimos en la cara. Y las lagrimas vuelven a entrar en nosotros, como las cosas que hemos perdido. Poco importa si sobre esa agua hay lágrimas después de haber llorado por amor, por dolor...
Hemos perdido pero nada se pierde en realidad. Cada segundo que pasa, cada luna que surge, no hace más que decirnos ¡VIVE! Vive y ama lo que tu eres, como tu seas, por lo que seas. Mira en lo alto hacia el cielo, cierra los ojos. Y no te canses nunca de soñar. La vida es muy corta como para no ser felices juntos.